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La pandemia COVID 19, un antes y después para el rol de la mujer en la sociedad contemporánea

mujer

 

Desde la fundación mujeres en la industria queremos generar diálogos de valor con mujeres que se han posicionado de forma exitosa en la industria a través de su trabajo y dedicación. En este caso destacamos la historia  de Virginia Quiñones, para hablar de cual es el rol de la mujer y su posición luego de aquellos años de pandemia que sin duda cambiaron la sociedad en la que vivimos.

María Virginia Quiñones es una mujer  venezolana graduada como Licenciada en Bioanálisis durante 3 años formó parte de un laboratorio clínico importante en Venezuela donde llegó a ocupar el   cargo de coordinadora de área durante 3 años para finalmente emigrar a Chile. En Chile encontró a Cercal Group donde actualmente actualmente se desempeña como head del área de capacitaciones y eventos, siguiendo el mismo propósito de su compañía transformar la visión de la calidad en la industria farmacéutica de América Latina.

La pandemia COVID 19 fue un evento que cambió la vida de muchas personas ya que bien o mal los hizo afrontar nuevos desafíos, es importante mirar atrás y recoger los aprendizajes de este suceso:

“La pandemia fue para mi un antes y un después en mi vida, me enseño que frente a cualquier adversidad puedo seguir avanzando y seguir creciendo como profesional, que no debo conformarme, solo debo transformar mi visión de cómo cumplir con los objetivos”

 Uno de los grandes miedos que surgieron para hombre y mujeres durante este tiempo de incertidumbre fue el tema laboral según la organización internacional del trabajo (OIT) la crisis del mercado de trabajo provocada por la pandemia de COVID-19 dista mucho de haber terminado, y al menos hasta 2023 el crecimiento del empleo no logrará compensar las pérdidas sufridas.

En consecuencia, se prevé que en 2022 el número de personas desempleadas en el mundo se sitúe en 205 millones, muy por encima de los 187 millones de 2019. Esta cifra equivale a una tasa de desocupación del 5,7 por ciento. Antes del periodo de crisis de la COVID-19, solo se había registrado una tasa similar en 2013.

Las mujeres se han visto excesivamente afectadas por la crisis. En 2020, la contracción del empleo femenino fue del 5 por ciento frente al 3,9 por ciento del empleo masculino. También fue más elevado el porcentaje de mujeres que quedó fuera del mercado laboral y pasó a la inactividad. Por otra parte, el aumento de las responsabilidades domésticas derivadas del confinamiento por la crisis ha planteado el riesgo de un “retorno a lo convencional” con respecto a los roles de género.

Maria Virginia hace un reconocimiento especial a la gestión de Claudia Velasco (CEO Cercal Group) y Raúl Quevedo (COO Cercal Group) ya que en ese tiempo de incertidumbre donde muchas empresas decidieron por una u otra razón prescindir de su personal, ellos generaron una conciliación desde una perspectiva familiar, esto representó un alivio para todos los colaboradores pues sin importar su género se encontró una solución para que todos los equipos continuaran, Virginia destaca este momento como un parteaguas en su vida pues:

“Ha cambiado mucho mi forma de ver las cosas, actualmente considero tener un trabajo estable y de grandes retos, forma parte de mi día a día y de mi vida personal, ahora estoy segura de que cualquier situación que se me presente podré superarla” 

La mujer contemporánea enfrenta múltiples retos, con la pandemia uno de los valores que mas representación tuvo fue el de la resiliencia, ya que a pesar de que algunos retos se hicieron más difíciles de superar, entre esos la maternidad, la postura de las mujeres no se hizo pequeña sino por el contrario lo asumieron todo con valentía, en el caso de María Virginia:

“Desde pequeña siempre me visualicé formando una familia, pero uno de mis grandes motores fueron mis padres que me inculcaron que ser madre no significa dejar de lado mi vida profesional, es más, con más razón mi vida laboral y profesional se debe reforzar para lograr tener la familia que quiero.”

Hoy ella  agradece el apoyo de su familia y de sus jefes gracias a esto ella asume el gran reto de ser madre con tranquilidad y con la certeza de que lograra cumplir a cabalidad tanto su rol profesional como su rol de madre.

Con la pandemia la convivencia al interior de los hogares  se transformo completamente ya que las personas no estaban acostumbradas a convivir el 100% del tiempo y asi mismo de responsabilizarse de lo que esto implica, es entonces que aparece el concepto de corresponsabilidad; Acuerdos que llevan las relaciones a asumir roles de forma equitativa ¿Cómo se ha dado el desarrollo de este elemento en la vida de Maria Virginia?

“Estamos en una época donde el hombre tiene las mismas responsabilidades de la mujer, por lo tanto creo que si se tiene un buen diálogo y acuerdos del hogar se puede llegar a un equilibrio, eso sin afectar mi vida laboral. Este aspecto para mi no debería ser un tema de conflicto sino más bien una  oportunidad para generar una mejor comunicación y dinámica con mi pareja en familia”

A partir de este punto quisimos conocer desde su experiencia como podría generar consejos para aquellas mujeres que de forma contemporánea están viviendo los mismos desafíos pero no saben cómo afrontarlos o cual es su rol, desarrollamos esto con una perspectiva del pasado a la actualidad:

“Si hay algo que le diría a mi yo del pasado es que no tome ninguna situación laboral problemática como personal, que deje fluir los problemas y se enfoque en soluciones. Que no piense con la cabeza caliente o busque errores de gestión y se dedique a mejorar el proceso así las cosas serán mucho más sencillas. Eso es lo que me hace la mujer que soy el día de hoy”

Del reconocimiento propio surgen nuevas ideas pero qué hay del panorama general de la mujer a día de hoy, su construcción sin duda nos muestra nuevas realidades y así mismo nuevas cualidades como la resignificación del empoderamiento:

“Creo que a lo largo del tiempo la mujer ha luchado por derechos, por ser reconocida y marcar un precedente. Desde mi punto de vista creo que las mujeres somos capaces de lograr cualquier cosa que nos propongamos somos inteligentes, fuertes, capaces y resilientes cualidades que en su conjunto nos hacen seres únicos, así nos empoderarnos; cuando una mujer conoce su propio potencial tiene la habilidad de empoderarse en los roles que se proponga, de saber decir SÍ o NO sin miedo a las consecuencias.”

 En este blog no solo nos gusta abordar el rol de la mujer sino también la mujer en la industria farmacéutica, los datos lo confirman que la presencia femenina en este rubro es importante pero no hay testimonio más valioso que el de una de mujer que está transformando la industria desde adentro: 

“En mi experiencia he visto la influencia de la mujer en crecimiento en la industria a la que pertenezco, he aprendido que ningún cargo puede ser clasificado según el género ya que tanto hombres como mujeres son capaces de desempeñar cualquier cargo todo está en su conocimiento y profesionalismo. Es un hecho que aún hay que educar y empoderar más a las nuevas generaciones para eliminar las brechas de género que existen actualmente.

No creo ser quien, para dar consejos, pero si me permiten dar uno les diría: no tengan miedo a desafiar cualquier reto, confíen en que tendrán las habilidades necesarias para cumplir sus objetivos, ser madre es parte de la vida como fuiste hijo, estudiante o profesional y así con un equilibrio en tu vida  podrás con el rol de ser madre o el rol que tu quieras ejercer como mujer”

En conclusión la pandemia COVID 19 represento un antes y después para las vidas de todas las personas, las mujeres entendieron que debían asumir un rol protagónico y resiliente frente a los retos que este evento dejó, las brechas que se crearon pueden volverse a cerrar es un compromiso y un trabajo de todos conseguirlo en el menor tiempo posible.